sábado, 26 de noviembre de 2022

The Strangest Man: The hidden life of Paul Dirac, Quantum Genius

There is no God and Dirac is his prophet.

Wolfgang Pauli

Excelente biografía del físico Paul Dirac, escrita por el también físico Graham Farmelo, que tenía en la pila de lecturas pendientes y finalmente encontré hueco para leer.

Se trata de una excelente obra que sigue una aproximación ortodoxa, reflejando los elementos personales, familiares e históricos. 

El trabajo de investigación, a lo largo de la etápa historica que cubre la vida de Paul Dirac, incluye minuciosamente detalles, adecuadamente justificados con referencias y cubriendo ampliamente los personajes que formaron parte de la vida del físico. Esto es especialmente interesante, considerando el papel que jugó Dirac en la definción de la teoría quantica de campos y la revolución consiguiente.

Dicho esto, percibo ciertas carencias. Sorprende la brevedad relativa con la que revisa la etapa correspondiente a los 30 ultimos años de la visa de Dirac, donde se centra en aspectos personales y familiares más que en su labor científica, aunque es posible que esto se deba a la ausencia de la misma. 

El relato correspondiente a esta etapa viene salpimentado con redencillas con su mujer y algunos comentarios propios de ancianos, que si bien serán precisos, creo que desvían el foco. Y esto en una época en la que necesariamente deben existir más material sobre la vida de Dirac.

Sorprende la practicamente total ausencia de mencion alguna al conflicto fruto de las interpretaciones deterministas versus la Interpretación de Copenague, el esfuerzo de Einstein-Podolsky-Rosen por desacreditarla y la victora final que supuso el sorprendente Teorema de Bell. La única mención que se hace a John Stewart Bell, es para mencionar su muerte. No es que no se incluya la opinión de Dirac al respecto, es que el tema está totalmente ausente. 

Otra omisión clamorosa es la de Von Neumann, que siendo húngaro como Manci, la mujer de Dirac, trabajó en el Instituo de Estudios Avanzados de la Universidad de Princenton, donde Dirac pasó numerosos años sabáticos, y figura imprescindible en el desarrollo de la mecánica cuantica y el program nuclear americano, solo aparece en una frase corta para hablar de su muerte en 1957.

Finalmente sorprende también el poco desarrollo de una de sus contribuciones de edad madura, la llamada Hipotesis de los Grandes Numeros, con importantes implicaciones filosoficas y que ha sido objeto de algunas obras posteriores, como the The Anthropic Cosmological Principle, publicado a penas un par de años después de la muerte de Dirac.

Respecto a la vida de Dirac, algunas cosas que no conocía han resultado interesantes. En primer lugar el odio que parece que siempre sintió por su padre, aunque el texto no recoge nada que pudiera justificar esto; el autor lo conecta con el suicidio de su hermano Felix, pero tampoco queda claro hasta que punto la personalidad de un padre estricto y enfocado en su trabajo, algo por otra parte que se ajusta al patron de la época, pudiera haber afectado tanto. Lo cierto es que en cuanto escapó de su casa, hizo todo lo posible por no volver, aunque sin llegar a desatender a su familia, sobre todo a su madre.

Otro detalle curioso, y más tras haber leido lo que el nacismo hizo a la ciencia en Europa, es que Dirac fue comunista, defensor de la Revolución Rusa y de Stalin, si bien más de espíritu que como activista, ya que nunca fué miembro del partido comunista británico.

Si bien, esto coincidió con una corriente social generalizada y que derivó en una permisividad que condujo a sonoros escándalos de espionaje en Gran Bretaña y Estados Unidos. Lo cierto es que ni siquiera la detención de su gran amigo Pyotr Kapitsa, en riesgo de ser asesinado por Lavrentiy Beria, encagado del desarrollo del programa nuclear de la URSS, y solo salvado por su cercanía a Stalin, le hizo renegar públicamente de su fe. 

También creyó a su amigo cuando le dijo que no había colaborado con el programa nuclear de la URSS (Dirac no participó significativamente en labores de guerra durante la Segunda Guerra Mundial) y posiblemente por su caracter, también perdonó a Heisenberg por su templada colaboración con el nacismo. Ciertamente fueron tiempos difíciles y Dirac pareció más leal a sus amigos que a los regímenes asesiones con los que por distintas razones se vieron obligados a colaborar.

En sus frecuentes viajes a la URSS, no parece haber percibido los efectos de las purgas o el Holodomor o si lo hizo, la biografía no recoge detalles alguno. Sobre el efecto que el comunismo tuvo en la ciencia de la URSS, menos divulgado que en el caso del nacismo, se puede consultar Love & Math.

Señalar que el libro si bien no entra en prácticamente ningún detalle de la parte científica, cuenta con numerosas referencias bibliográficas y notas por capítulos. Pero por no incluir, no incluye la Equación de Dirac, aunque ciertamente se recogen sus principales contribuciones como el positron o el monopolo mangético

Por último, es texto está escrito en un delicioso inglés, que si bien hará dificil su lectura para aquellos que no cuenten con el nivel adecuado, resulta muy agradable para los que pueden valorar el idioma. El texto cuenta además con unas pocas fotografías de todos los periodos de la vida de Paul Dirac.

En definitiva una obra estupenda, de la que cerramos la reseña con una estupenda canción de Belle and Sebastian






domingo, 23 de octubre de 2022

El Hombre del Futuro: La vida visionaria de John Von Neumann

Recientemente me hice con una copia de la versión en castellano del The Man from the Future: The Visionary Life of John von Neumann, de Ananyo Bhattacharya y desde que cayó en mis manos no he parado hasta acabarlo.

Leyendo La Catedral de Turing, de George Dyson, descubrí los aspectos más destacados de lo que para mí resultaba un científico olvidado. Más allá de poner nombre a la arquitectura más habitual de los computadores actuales, John Von Neumann no ocupaba espacio alguno en de mi lista de intereses.

Esto cambió como dije tras la lectura de La Catedral de Turing y compré algunas referencias técnicas y alguna otra biografía del matemático húngaro. Estas lecturas estaban siempre pendientes, a la espera de un buen momento y ahí seguían cuando me tropecé con esta referencia actualizada.

A diferencia de lo que uno pudiera pensar leyendo el título de la obra, no se trata propiamente de una bibliografía. Más allá de algunos detalles biográficos en los primeros capítulos y algunos detalles en el último, la obra contiene una compilación de las principales áreas en las que trabajó el científico. 

Así pues, si lo que se busca son datos biográficos, esta no es la referencia adecuada. Bien es cierto que la última parte de su vida estuvo relacionada con numerosos proyectos secretos, pero la omisión es intencionada. Imagino que un tratamiento adecuado hubiese requerido un trabajo mucho más profundo y la dedicacion de varios años.

No obstante, este enfoque no desmerece la obra. El autor realiza una compilación, basada en las principales referencias divulgativas de cada uno de los temás, con especial querencia por las habituales. Además, se excluyen tratamientos farragosos de los aspectos técnicos, que son referidos principalmente a los textos de Von Neumann y alguna otra referencia especializada.

Resulta entonces un tratamiento divulgativo de fácil lectura y con numerosas refrencias, lo que debería hacer las delicias de jóvenes y adultos proclives a la veneración científica, que no haría más que la mínima justicia de lo que se presenta sin lugar a dudas como el científico con más visión del siglo XX.

Ciertamente la lista de trabajos influyentes resulta interminable: 

Y todo esto dentro de su labor como mecenas de las principales mentes de la primera mitad del siglo XX, el desarrollo de la bomba atómica, patrocinio de las primeras soluciones de aprendizaje automático o su papel como asesor gubernamental y de la Corporación RAND.

Uno de los aspectos que destacaría de la obra de Von Neumann y que se refleja bastante bien en el texto es su caracter visionario. No solo formuló los principios de numerosas disciplinas sino que fue capaz de, introduciendo elementos epistemológicos, vislumbrar el futuro desarrollo de la disciplina y su aplicación.

En fin, salvedades menciondas aparte, se trata de un buen libro divulgativo. Que la mención algo frívola a Greta Thunberg del último capítulo no os distráiga. Altamente recomendable.






sábado, 22 de octubre de 2022

Maldita Ciudad

Son las cuatro en punto. Espero hasta ese preciso momento para salir de casa, cerrando la puerta tras de mí. Bajo a pie las escaleras dos pisos, llevando mi maleta en la mano. Desde el portal, la calle se anticipa tranquila. Una vez fuera, la madrugada templada termina por conformar los requisitos de un paseo agradable. Y espero unos segundos tranquilamente hasta que la puerta termina por cerrarse con un sonido mecánico. 

Durante esos segundos de espera continuo con mi maleta en mano, en un estado expectante, como preparándome para un largo viaje, aunque no serán mas de unos pocos días. Y comienzo a caminar. 

Lugares comunes durante el día adquieren a esta hora elementos novedosos, que automáticamente archivo para rememorarlos llegado el momento. Según avanzo constato una ciudad tranquila, aunque tras unos minutos andando mi mente incorpora a modo de banda sonora, los versos de Maldita Ciudad. 

Cuando llego a la esquina de la Calle de la Estación, el sonido de un reloj invisible da comienzo a un tiempo, que hasta ese momento parecía congelado. Y así, me cruzo con dos hombres, de aspecto elegante, que portan maletines. Conversan animadamente en francés, sin aparentar la somnolencia de los que madrugan. Según continuo, en dirección a la estación central, los sonidos de sus pasos se desvanecen y vuelvo a tener la sensación de caminar solo.

Dos figuras recogidas en un banco se sobrecogen al oír mis pasos y tras un breve acomodo, continúan abrazados como si estuvieran durmiendo en el salón de su casa. Unos metros más adelante, el suelo aparece iluminado por la luz amarilla de las farolas y las hojas caídas que comienzan a cubrirlo todo dibujan un puzle incompleto y reluciente. Según avance el otoño, se completarán las piezas restantes cuando el frio se acentúe. 

Inevitablemente me acerco al centro y los sonidos humanizan una ciudad que hasta ese momento parecía solo mía.




viernes, 2 de septiembre de 2022

The Honors Class by Benajmin H. Yandell

 It´s a bourgeois , who still does algebra!
Long live the unrestricted individuality of the trascendental numbers.

Excelente referencia de la historia de la matemática y registro único de la formulación de los 23 problemas de Hilbert, su estado y el proceso de investigación que condujo a la solución de los actualmente resueltos.

No recuerdo exactamente dónde encontré referenciado este libro, pero adquirí una copia de segunda mano, ya que actualmente se encuentra descatalogado. Casi por casualidad comencé a leerlo y no pude parar hasta acabarlo.

Tras una breve referencia bibliográfica sobre David Hilbert, el texto continua estructurado en varias secciones, agrupando problemas relacionado, siguiendo un orden que difiere del que siguió Hilbert para la presentación inicial y donde las áreas algebráicas y de teoría de números predominan, reflejo de las preferencias y área de experiencia de David Hilbert.

El texto comienza por lo que el autor llama los problemas fundacionales, el segundo, el primero y el décimo, es decir, la consistencia de los axiomas de la aritmética, la hipótesis del continuo y el existencia de un método para determinar la existencia de soluciones de ecuaciones diofánticas generales.

Tras estos, continuan los problemas fundacionales de áreas específicas, comenzando con el tercer problema. Este, por ejemplo, fue el problema que se resolvió en primer lugar; Max Dehn, aun siendo un estudiante, introdujo un invariante geométrico que le permitió una solución rápida, aunque fue mejorada y simplificada casi inmediatamente. 

El texto prosigue ordenadamente presentando diferentes problemas, pero salvo contadas excepciones, haciendo más énfasis en los aspectos bibliográficos de los protagonistas que en el trasfondo matemático, lo que ciertamente deja un sabor agridulce, y que hace echar en falta algunas explicaciones y descripción más detalladas, así como referencias más técnicas. Esto sin duda habría sido una obra titánica, por lo que más que mis comentarios son más un anhelo que una crítica.

Al margen, en cada uno los capítulos, se hace patente la enorme tragedia que asoló europa con la llegada del nacismo y que también tuvo su reflejo en el mundo de las matemáticas. Como comentario al margen, muchas de las prácticas xenófobas y racistas resultan lamentablemente familiares, aun hoy en día presentes en los nacionalismos que asolan España y otras áreas de Europa.

El autor estructura el contenido donde aborda cada problema con importantes elementos históricos, pero apuntalando las contribuciones, e incluso los pasos en falso que condujeron a la solución, incluyendo anécdotas y comunicaciones directas con los protagonistas de la investigación, amigos y familiares. La labor de documentación ha sido sin duda increíble.

El texto contiene además una fuente de referencias, no solo de divulgación e históricas, sino también referencias técnicas que permiten seguir el proceso de investigación. Para completar, el autor incluye numerosas fotografías de los matemáticos. 

El texto se cierra con la ponencia donde David Hilbert presentó sus problemas. Sin duda un detalle de agredecer, pero lo cierto es que hubiese sido mucho mejor introducir cada problema con una breve formulación ortodoxa y detalles como el estado del problema, el año de solución y un enlace a las fuentes históricas y la versión moderna de su demostración.

Dicho todo esto, se trata sin lugar a dudas de una referencia imprescindible para entender las matemáticas del siglo XX. 




domingo, 17 de julio de 2022

La Marcha Radetzky, de Joseph Roth

 El hijo callaba. 
Pero el padre le oía callar.

Según se acumulan los años, creo que a todos nos resulta familiar esa sensación de anhelo, el vigor que adquieren los sentimientos que rememoran nuestra vida pasada. Y así, de manera inapreciable, los recuerdos de nuestra infancia adquieren una vívida relevancia, tomando por asalto nuestros pensamientos actuales.

Aunque numerosas obras han rememorado estas vivencias, creo que existe un elevado consenso sobre cómo el fin del mundo que fue desembocó en la primera de las grandes atrocidades del siglo XX: la Primera Guerra Mundial. 

La Marcha Radetzky presenta una historia, que arrancando el la Guerra Franco Prusiana y finalizando a mitad de la Primera Guerra Mundial, parece señalar que por primera vez en la historia, el salto fue tan grande, que el paso de una generación a la otra se completo con la aniquilación de la nueva generación, o al menos 20 millones de ellos, y el olvido de la antigua. El desconcierto fue tan grande, que tan solo unos 20 años mas tarde, se reanudó la destrucción, esta última vez con más efectividad mortal. 

El texto recorre de manera desafectada el fin de una época, el desmoronamiento del Imperio Austro-Hungaro, en pequeños pasos, degradado en pequeñas historias cotidianas, arrastradas o arrastrando, lenta pero inexorablemente, los sucesos históricos. Y lo hace con una prosa cuidada, poética en ocasiones y pareciendo reflejar en momentos la propia bajada a los infiernos del propio autor.

Ha sido toda una revelación, en especial, después de leer algunas obras de descuidada prosa contemporánea. Me ha permitido volver a valorar la novela del siglo XX a mitad de camino entre el realismo y John Fante.

Altamente recomendable.






domingo, 3 de julio de 2022

Tomek. El Rio al Revés, de Jean-Claude Mourlevat

Nueva revisión de la serie "Libros para antes de dormir", que vengo leyendo a mi hija, en una tradición que se ha convertido ya en todo un ritual familiar. De hecho, durante las últimas semanas me tocó viajar por unos días y con la ayuda de mi esposa y mis otros hijos, se mantuvo el rito.

En esta ocasión recuperé uno de esos títulos que andan por mi librería y que llamó mi atención por su cuidada edición, tipografía adecuada para niños y una longitud de capítulo que permite su lectura completa en unos 10 minutos. 

Efectivamente, el libro incluye un conjunto de ilustraciones realmente cuidadas con las que se abren cada uno de los capítulos, y que completan una experiencia estupenda.

Además, la historia es fascinante. Por un lado, el autor elabora una fantasía propia, no excesivamente compleja, pero con encanto casi cinematográfico, que da cabida a unos personajes con cierta madurez, donde el lector se puede adentrar en cierta sofisticación de la edad adulta.

De hecho, no solo he encontrado el libro interesante para leer a mi hija, sino que también me ha resultado muy interesante a mi. La literatura para niños tiene su encanto.

En definitiva, muy interesante y recomendable.





El mapa y el territorio, de Michel Houellebecq

Después de un tiempo sin leer novela, me decidí a leer a Houellebecq.  Recuerdo haber leído a Houellebecq cuando estaba en la universidad y la sensación confusa que me dejo, aunque para hacer justicia, debo decir que no recuerdo nada más: ni titulo, ni historia... nada. 

En esta ocasión, también me resultó confuso. El texto se desarrolla en una única secuencia que parece explorar tramas alternativas: pictórica creativa, paterno filial, chica busca chico, el azaroso mundo del negocio del arte, joven promesa del arte busca estrella decrépita, misterioso crimen (la parte más sorprendente) o el desvanecimiento vital.

Entiendo que el autor siempre puede alegar que se trata de un proceso creativo con resultado literario incuestionable; otros podrían elucubrar que el proceso alimenta la industria literaria, que los plazos con el editor apremian, que una vez alcanzado cierto éxito el lector se alimentará de cualquier deposición que el escritor produzca o la más interesante, que se trata de una provocación con réditos que justifican de sobra el intento.

Y si, el resultado es confuso porque no deja de ser interesante, habiéndome mantenido durante algunos ratos honestamente pegado al libro y solo las piruetas argumentales hacían más difícil el retorno.

Creo que continuaré con Las Particular Elementales....


 

sábado, 30 de abril de 2022

Sonámbulos, de Christopher Clark

And as we wind on down the road
Our shadows taller than our soul

Tras leer Los Cañones de Agosto, tenía pendiente profundizar algo más en la historia de la Primera Guerra Mundial. Uno de los libros más citados últimamente era precisamente Sonámbulos y tras un lapsus en lecturas histórica, ha llegado el momento.

La primera parte, Los Caminos  que llevan a Sarajevo, analiza las secuelas de la Guerra Franco Prusiana de 1870 y el desmembramiento del Imperio Otomano en los Balcanes. Comienza presentando el nacionalismo Serbio, que caótico y corrupto, aunaba intereses en torno a una concepción maximalista, en términos de influencia geográfica, y xenófoba en contra de los que consideraba ocupantes de su patria delirante. Esta concepción asesina y genocida se convirtió en un mecanismo para hacer coincidir la realidad con esa ensoñación demencial que llamaban patria.

Otro elemento para mi sorprendente es como las naciones más desarrolladas y que pudieran pasar por civilizadas instrumentalizaron el nacionalismo como peones de una lucha a muerte entre ellas. A falta de soluciones beligerantes más convencionales que habrían de desarrollarse más tarde, manejaron el nacionalismo como arma letal. 

La Primera Guerra Mundial solo fue el desenlace del odio anidado en la sociedad Europea durante generaciones, que si bien hasta ese momento se había resuelto como sesiones dominicales de deporte mas o menos sangriento, pero dejando al margen a la población civil, el desarrollo industrial y la tecnología pusieron armas de destrucción masiva al alcance de los sociópatas de Europa. 

Produce estupor pensar como, contando con tales antecedentes, la sociedad y las instituciones europeas miraron hacia otro lado, permitiendo una nueva Guerra de los Balcanes que trajo al corazón de Europa, llegando al siglo XXI, todos los horrores del nacionalismo. En esa misma línea, aún en España sufrimos ese nacionalismo que no por delirante es menos xenófobo y hasta recientemente genocida, con la indiferencia, sino complacencia de gobiernos de toda Europa.

La segunda parte, Un Continente Dividido, resulta más sorprendente si cabe. En esta parte se presentan los elementos que determinaron la política exterior de los principales países que participaron en la contienda, es decir, Alemania, Francia, Reino Unido y Rusia. 

El primer hecho llamativo es la desmedida ambición imperialista de estos países, que no dudaron no solo en aplastar y someter a todos aquellas pueblos dentro de los dominios a los que se consideraban con derecho, sino que incluso abocaron a la guerra a sus ciudadanos por ser incapaz de repartirse el resto del mundo. En este sentido se echa en falta un análisis de cómo los poderes económicos con enormes intereses en este delirio imperialista influyeron en el desenlace final. Aunque no se menciona, no resulta complicado percibir su presencia.

El segundo hecho francamente revelador es la ausencia de dirección o mejor dicho autoridad en la política exterior que concatenó pasos en la trágica escalada, sin que estuviera claro de dónde surgieron. 

Por un lado, los monarcas en los imperios germano o ruso, o una corte de funcionarios capaces de manipular a los ministros de economía, defensa o exteriores en Francia o ministros que confabulaban de espaldas al resto del gobierno y por supuesto el parlamento, terminando con una opinión pública, signifique esto lo que signifique, que alimentaba su odio de una prensa intoxicada o intoxicadora, siempre dispuesta a vender una portada o columna de opinión. 

Como bien dice el autor;

[...] la rápida sucesión de interacciones entre las estructuras ejecutivas que apenas conocen sus mutuas intenciones y que obran con un bajo nivel de seguridad y confianza (incluso dentro de las respectivas alianzas) y con altos niveles de hostilidad y paranoia. 

Es más, me atrevería a decir, que tanto fue así, que no satisfechos con los veinte millones de muertos, apenas pasados 20 años estarían listos para una revancha casi definitiva. O peor aún: el autor apunta a la referencia The War Council: McGeorge Bundy, the NSC, and Vietnam de Andrew Preston (Cambridge, MA, 2006) en la que se describe una lucha de poderes similar, con el desenlace también conocido y que Max Hasting describen en Vietnam: An Epic Tragedy, 1945-1975 y que ha guiado la excelente serie documental The Vietnam War.

Como colofón de esta segunda parte, el autor incluye una breve sección a la que llama "¿Una crisis de masculinidad?" y donde presenta una perspectiva de género de los principales actores del hecho histórico. En esta sección se incluye lo que pare mi resulta más interesante: los desequilibrios mentales, naturales o provocados por el estrés, que presentaban casi todos estos actores. Sea como fuere, el escenario resultaba idóneo para el desenlace finalmente acaecido.

La tercera y última parte, llamada "Crisis", arranca con la narración del fatídico día, que contiene todos los elementos de un thriller moderno, y que conduce a una lectura trepidante. Curiosamente, no incluye detalles adicionales significativos y podría decirse que pasa de puntillas sobre los aspectos policiales y judiciales de la investigación, para saltar rápidamente al análisis de las reacciones políticas.

He encontrado especialmente interesante que, como parte de este análisis, el autor incluye los elementos de la teoría de la decisión que caracterizan el razonamiento e introduce como decisión de opción, transformadora e irreversible, a la que se enfrentaba los dirigentes austrohúngaros. A resumidas cuentas, parece que se trata de una decisión en la que no puedes acertar...

Por lo demás, en esta tercera parte, se ahonda en lo que a mi parecer son las principales ideas del texto (1) la decadencia inevitable del imperio Austro Húngaro, (2) el carácter preventivo que la guerra adquirió para Alemania y (3) la hostilidad latente con la que Francia y Rusia alimentaron no solo el nacionalismo Serbio, sino la desestabilización de la región balcánica completa, incluyendo el Imperio Otomano. 

Escribo estas líneas durante la guerra desencadenada por la invasión de Ucrania por parte de Rusia y, supongo que es inevitable observar estos sucesos bajo la influencia de lo que acabo de leer. Asumir este sesgo, no me hace más llevadero el desaliento.

En fin... 



domingo, 20 de marzo de 2022

El científico Rebelde, de Freeman Dyson

 

"Los gatos son perros y los conejos también, 

pero las tortugas son insectos y viajan gratis"

Grata sorpresa en mi primera lectura de un título del famoso científico Freeman Dyson

Y es que, tras acabar mi últimas lecturas, echando un vistazo a las que tengo pendientes, encontré El Científico Rebelde y a pesar de mis reticencias iniciales, le di una oportunidad. Debo aclarar que las reticencias eran debidas a encontrarme un tanto débil en términos de salud y no estar seguro de poder digerir un texto que asumía denso.

Pero lo cierto es que como descubrí nada más empezar, se trata de una colección de artículos y revisiones bibliográficas o textos de preparación de conferencias, que como denominador común exigían al autor cierta amenidad y extensión acorde. La mayoría de los textos habían aparecido en el The New York Review.

La obra se estructura en cuatro secciones en los que se abordan temas candentes de la ciencia actual, la guerra y la paz, la historia de la ciencia y los científicos, y ensayos personales y filosóficos. El libro, que contó con una revisión en 2006, muestra a un Dyson con una dilatada experiencia vital, pero al orden del día.

Tanto por los temas abordados como por las opiniones vertidas, el texto es de una rabiosa actualidad, en estos momentos en los que la invasión de Ucrania por Rusia, trae de nuevo el conflicto intelectual y filosófico sobre guerra, o que disciplinas como inteligencia artificial reabren el debate de la ética en la ciencia.

Descubro en Dyson es un intelectual preocupado por la distribución de riquezas, la acumulación excesiva de poder en las empresas y su cortoplacismo, o ese liberalismo injusto para aquellos que parten de una situación en desventaja. 

En base a su historia personal y lo que he podido extraer de la lectura, tengo la impresión que creía firmemente en la labor que los intelectuales pueden jugar asesorando a un gobierno y controlado por la sociedad civil. 

En sus escritos sí que deja meridianamente claro la necesidad de impulsar la ética profesional para limitar las areas de investigación y alcanzar acuerdos para establecer multilaterales que limiten el desarrollo de armas o investigaciones de riesgo.

La sección correspondiente a la guerra y la paz incluye algunas reflexiones muy interesantes sobre la II Guerra Mundial y la estrategia militar, fruto de la lectura del libro Armagedón: La derrota de Alemania 1944-1945 de Max Hastings.  

En cuanto a los alegatos pacifistas, son meritorios las menciones a aquellos que mantuvieron su postura pacifista, llevándola al extremo con éxito, como por ejemplo los ciudadanos del pueblo Le Chambon, Leo Tolstoi o Norbert Wiener.

Junto con esta sección, la correspondiente a la historia de la ciencia y los científicos ha sido la que más me ha gustado. En esta parte destacaría en especial el capítulo dedicado a Isaac Newton o la revisión del libro donde se analiza cómo siguiendo caminos distintos, Einstein y Poincaire llegaron a la misma formulación de la Teoría de la Relatividad

Como he comentado, los artículos son revisiones de textos sobre científicos o historía de la ciencia, por lo que un subproducto interesante es la cantidad de obras que descubro, y que durante la lectura he ido añadiendo a mi lista de lecturas futuras. En definitiva un texto muy interesante y ameno.

Recomendable.




domingo, 13 de marzo de 2022

Mi tía terrible, de David Walliams

Continuando con la serie que comencé hace ya unos meses, esta es otra de las lecturas para antes de dormir. 

Se trata de un libro de cierta extensión (ronda las 400 páginas) que permite una lectura adecuada, con capítulos cortos e ilustraciones atractivos. 

Si bien la historia es trepidante, y ha mantenido el interés de mi hija hasta el último momento, la temática se me antoja un tanto inadecuada para niños pequeños. Y es que uno de los personajes principales es de una maldad desmedida, otorgándole categoría casi de reality y prensa amarilla tan popular entre el público británico donde parece que el autor cuenta con éxito notable.

Supongo que es cuestión de gustos, pero en literatura infantil me resulta más atractiva la fantasía convectional. En fin, de lectura muy atractiva y pegadiza, pero en adelante, me parece que prescindiremos de este autor, en busca de algo más normal.



      


Feria, de Ana Iris Simón

 La primera vez que intenté leer este libro, apenas pude pasar de las primeras páginas. Me produjo rechazo insuperable lo que yo percibí como un tono de queja. Al llegar a lo del año "follando y comiendo Doritos en Bruselas",  no pude continuar.

Pero lo cierto es que desde hace unos meses estoy más interesado de lo habitual en literatura en Español y aprovechando este fin de semana largo, le di una nueva oportunidad. Y el resultado ha sido completamente diferente.

La autora relata su travesía vital, si es que se le puede llamar así llegando raspado a los 30s, en un mundo que desaparece, ya que todos lo hacen, dejándose los recuerdos en jirones, que en algunos casos han alcanzado la categoría mágica que envuelve la realidad cuando el tiempo la transcurre

Página tras página, todo cobra sentido, el relato se despoja de los prejuicios y encuentra la narrativa de una generación huérfana de épica y cuyos ideales no le llegan a final de mes. 

A pesar de mi temores iniciales, la cotidianidad devora cualquier muestra de lamento o desengaño: se trata simplemente de la vida, que conecta islas existenciales generación en generación, para continuar un día más, en el que el bisabuelo Vicente sigue ahí.   

La autora, manchega, con su obra añade otra referencia, esta ya del siglo XXI, a nuestro páramo en llamas y lo hace sin alterar los elementos que, por políticamente incorrectos que pudieran parecer, son los que verdaderamente constituyen la historia viva de muchos de nosotros.

Para aquellos que lo quieran ver en términos sociales, es decir, políticos, la autora deja dos o tres frases contadas que podrían ayudar a enter porque la generación más concienciada con las injusticias de la historia, apenas es capaz de ayudarse así misma. 

Por mi parte, no ahondaré en ese razonamiento; creo que sería una falta de respeto al clan de los Simones.



martes, 22 de febrero de 2022

Un daño irreversible, de Abigail Shrier

Interesante obra de la periodista Abigail Shrier en la que trata un fenómeno  preocupante, cuyo alcance aún no se ha determinado completamente y que, de confirmarse los temores compartidos por la autora, conducirían a una verdadera tragedia.

En un texto de fácil lectura la autora alerta sobre el preocupante aumento de  falsos positivos transgénero que se da entre niñas en edad preadolescente. Este colectivo es azotado con frecuencia con peligrosas tendencias, víctima de la anorexia, bulimia, la autolesión y el suicidio. En el caso descrito por la autora, parecen darse serios agravantes.  

Fruto de una combinación perversa de factores, que si bien individualmente responden a la necesaria protección del colectivo trans, en conjunto aumentan no solo el número de falsos positivos trans sino que además facilita, sin las adecuadas medidas de control, tratamientos que conllevan significativos riesgos emocionales y físicos y que en los casos más severos deja secuelas permanentes.

Aunque la combinación bien pudiera parecer inverosímil, lo cierto es que la terapia afirmativa de género, que hacer recaer en los adolescentes el peso del diagnóstico y excluye cualquier otro evaluación terapéutica, la prescripción de fármacos sujeta únicamente a un requisito informativo y unos protocolos de protección de los jóvenes, que pensados para situaciones marginales, les aislan de sus padres, resultan un mix devastador para la población juvenil. 

De esta forma, si bien aquellos jóvenes que presentan realmente disforia de género cuentan con todas las garantías y facilidades, aquellos en los que la disforia responde a otras razones, se ven arrastrados en una deriva confusa y de elevada componente autodestructiva.

En este punto, las familias afectadas y los profesionales que son testigos de primera mano y que alarmados reclaman más control son pasto del activismo e intereses espurios que amplificados por la virulencia de las redes sociales imposibilitan una análisis adecuado.  

Personalmente encuentro similitudes con otras prácticas médicas, como la terapias de electro/quimio shock o el uso de opiáceos, que llevadas de un optimismo como poco iluso y acientífico, rechazaron no ya reconocer sino siquiera analizar los casos que contradecían sus planteamientos, convertidos ya entonces en doctrina.

En fin, sirva el texto para mejorar las investigaciones que puedan arrojar luz y conducir a una revisión de las terapias y protocolos que garanticen la salud de los adolescentes. 



martes, 1 de febrero de 2022

Los Dragones del Castillo Ruinoso, de Terry Pratchett

 Nueva lectura para antes de dormir y esta vez de la mano de un autor moderno de literatura infantil, Terry Pratchett

El libro andaba bastante tiempo por casa, oculto entre algunos otros y casualmente lo encontramos buscando algo diferente.

La obra se compone de un conjunto de historias más o menos cortas y ciertamente originales, acompañadas de ilustraciones del autor. 

En la colección se distinguen claramente dos historias algo más extensas y que resultan un poco más difíciles de acabar en una única sesión de lectura. El resto, se encajan fácilmente en lo que una niña puede escuchar antes de dormirse.

Todas ellas son extremadamente divertidas, arrancádonos con frecuencia unas sonrisas, y pertenecientes a una particular imaginería, cercana y cotidiana incluso que sin duda las hacen atractivas para niños.

Así pues, altamente recomendables.


 

lunes, 31 de enero de 2022

Caída

El tiempo arrecia, 

agostado el reloj de piedra

alarga su sombra,

 mientras la yedra, hidra voraz

despide la forma que fue, 

para ahondar la memoria

ahuecada, de ecos devorada 

que antes que verde, 

se volverá mar, 

ahuyentada 

hacia profundidades 

donde el viento rescata, 

la tormenta que un día partió

la olas derrotadas, en orilla, 

en susurros de chapinas desconchadas. 


 

domingo, 9 de enero de 2022

Mortal y Rosa, de Francisco Umbral

Francisco, Paco, Umbral siempre fue para mí un excelente columnista periodístico, del que no había leído ninguna de sus obras literarias. Con frecuencia había oido sobre Mortal y Rosa maravillas y recomendaciones, y finalmente me decidí a lograrme un ejemplar y abordar su lectura. 

Se trata de una obra con una estructura interesante, compuesta de pequeños fragmentos, en los que, con una prosa poética, el autor recoge vivencias, plasma ideas, se abren paso sentimientos, todo ello haciendo uso de sentencias breves, versos que se conectan en párrafos agrestes. Un texto de exigencia lectora.

Trasluce un proceso creativo, en el que me parece ver un escritor en sus cuarenta (un hombre del Metro) y aún abriéndose camino, más ingenuo, aun en desarrollo, que disciplinado, volcando con dedicación laboral mas que creativa, la producción requerida cada jornada.

En medio de esa cadencia productiva, ese trasunto de un día al siguiente, la obra se ensombrece con lo irremediable, lo inevitable de la tragedia. En un español rico y sofisticado, con recursos poéticos, el autor va perfilando detalles sobre su persona, en un sentido más físico que intelectual, su esencia sexual, que se presiente adultera, ¿culpable? e irremediable, y así con otros detalles que podrían considerarse casi costumbristas.

Como de pasada, bien avanzado el libro, se encuentran pasajes conectados con su hijo. Si uno no supiera las razones, el contexto en el que escribió el libro, podría incluso no percibir el hecho fundamental de este periodo vital del autor como fue de la muerte del niño. Una vez conocido, todo tiene mucho más sentido: las palabras como refugio, el relato fragmentado, distraído, obnubilado...  

El autor encuentra la palabra, la frase que nos transporta a lo que debe ser el Madrid de los 70, pero a diferencia de otros, digamos que Ferslosio con Jarama, con un foco en lo íntimo, en lo individual, ¿en lo canalla?  

La misma efectividad lograda en la descripción de lo cotidiano, se consigue en esa literatura litúrgica, aunque parece que no sanadora ni redentora. El resultado se puede ver como el proyecto de libro destruido por la muerte, el autor desbaratado por sentimiento descontrolados. 

Y así, todo en conjunto, se trata de una obra sublime, posiblemente no intencionada, pero única para entender lo humano, las mil caras de la desdicha. Se me antoja necesario destacar otra sensación tras la lectura y es el tratamiento del tiempo. 

Carente de referencias temporales, poblados los momentos de recursos descriptivos, incluyendo subidas y bajadas por escaleras que parecen la historia de la humanidad, la narración parece transcurrir en slow-motion, a veces, otras, el tiempo parece detenido en el universo del autor, mientras que en su entorno, pasan las horas y la tarde da paso a la noche, mientras la nubes raudas atraviesan los cielos.

Quizás pueda resultar extraño, pero trasmite una sensación muy cinematográfica. Muy de José Luis Garci, muy de novela gráfica de Robert Crumb y llegando a la pirueta excesiva, podríamos decir que muy Charles Bukowski, patrio eso si.



domingo, 2 de enero de 2022

El cerdito de Navidad, de J.K. Rowling

Nueva entrega de la serie "lecturas para antes de dormir", esta vez de la mano de la aclamada autora de libros de magia y literatura fantástica, J.K. Rowling

En esta ocasión, la autora deja a un lado el mundo mágico de Harry Potter, origen de su éxito literario, para centrarse en un estilo que bien podría llamarse "Cuento de Navidad". Y así cuál Mr Scrooge juvenil, el personaje del cuento, víctima de su ira y, justo es decirlo, la de algún otro personaje secundario, se adentra en un mundo que le ayudará a afrontar su actos y a pasar página. 

Al igual que en la versión de Charles Dickens, las aventuras transcurren en un mundo que bien pudiera ser onírico, y que en esta ocasión encuentra su desenlace en la noche de Navidad. Sin entrar más en detalles sobre la trama, el libro tiene una serie de ventajas incuestionables como libro de lectura para niños. Los capítulos son cortos, la fuente grande y la edición incluye unas estupendas ilustraciones que ayudan a imaginar la historia.

Desde mi punto de vista, como adulto lector, la historia tiene algunas peculiaridades. Antes de consolidarse, la intención, el fondo del co protagonista parece oscilar entre la benevolencia y la malevolencia. Después, los nombre que se asignan a parajes y personajes parecen sufrir con la traducción. Es más, algunos pasajes que incluyen algunos versos quedan raros. 

Ni qué decir, que nada de esto es apreciable por la audiencia infantil, para la que, si nos atenemos a mi experiencia, el texto es una absoluta maravilla. Tanto fue así, que llego un punto en que mi hija continuaba leyendo más allá de la ración asignada y esto, teniendo en cuenta que la ración durante la Navidad ha sido generosa, dice mucho del libro.

Así pues, una estupenda obra para niños. 

Y para poner música, recuperamos un tema ciertamente fantástico....



El Paseo, de Robert Walser

Cuidada edición, a manos de la Editorial Siruela, de una de las referencias más populares del suizo Robert Walser. El autor recobra notoriedad por la reciente edición en castellano de sus Bleistiftgebiet o microgramas, que completa su aura de autor ¿maldito?, que acabó sus días en un sanatorio mental. 

Pero lo cierto es que más allá de esta peculiar obra, Robert Walser es autor de un conjunto de obras destacadas como El Paseo o Berlin y el Artista. En el caso particular de El Paseo, el escritor nos relata una de sus caminatas rutinarias, siguiendo un estilo que me resulta confuso.

Por un lado, el texto recoge detalles propios del entorno y la naturaleza que envuelve el divagar sin rumbo del autor, con menciones cercanas al costumbrismo. 

Pero a la misma vez, el autor incluye algunos de las reflexiones que le asaltan durante su paseo. Y estas últimas, parecen apuntar a la fragilidad mental que finalmente condujo a su confinamiento. 

Y es que, a lo largo de una jornada itinerante, Robert Walser ajusta cuentas casi con todo el mundo, saltando de amargas quejas y reproches a almibarados comentarios de halago, educados hasta el extremo y todo esto sin solución de continuación.

Por lo que a mí respecta, la parte costumbrista es agradable y nos retrotrae a otros tiempos, mientras que los oprobios me parecen fuera de contexto.

En cualquier caso, como experiencia literaria, resulta interesante, aunque a ciencia cierta, no para todos los públicos.  






sábado, 1 de enero de 2022

Elantris

Mis lecturas dentro de la categoría de fantasía y ciencia ficción son limitadas. Solo atiendo referencias de algunos amigos o recomendaciones que encuentro en prensa. Gracias a una de estas, me adentré en la lectura de  Elantris, referencia clásica de la literatura fantástica.

Lo cierto es que, ya sea porque voy recuperando interés en la lectura en general, por tratarse de la versión en español, por la calidad de la obra, o mas probablemente por una combinación de todos estos factores, me leí Elantris en los cuatro últimos días de 2021.

La edición, que corresponde con la definitiva del autor Brandon Sanderson, la compré en mi último viaje a Madrid, junto con algunas otros títulos como Tuf Voyaging o Dying of the Light, ambas del celebrado George R. R. Martin. Así que es posible que en breve otras reseñas en este blog se ocupen de ellas.

Volviendo a la obra, me ha resultado interesante, aunque quizás no por los motivos obvios. En primer lugar, el texto realiza un disección psicológica de los principales personajes, resaltando las relaciones políticas de la clase dominante, el liderazgo capaz de reconstruir la grandeza y las ambiciones de la lucha por el poder. Y todo esto, en un contexto dinámico que aporta realismo a los personajes, aunque en justicia, en una ventana de tiempo poco realista para cambios de la magnitud resaltada.

Esto se cocina a fuego lento durante los primeros dos tercios de la obra, enganchando al lector mientras se enhebra la trama, organizada en tres líneas diferentes, que confluirán llegado un punto. Esta primera parte de la obra es, a mi parecer, la mejor. Lo que es un tanto decepcionante es el batiburillo final, que sin llegar a decepcionar, hacer pensar sobre la dinámica creativa y la economía de la producción literaria.

Por un lado, comenzando con la economía de la literatura, parece como si el autor súbitamente, se diese cuenta de que "se le pasa el arroz" y ¡tachan!, en una serie de sucesos ciertamente suficientemente conectados, se produce un desenlace listo para sacar del horno y publicarlo. 

Y, creedme, mientras leía, no podía dejar de pensar en George R. R. Martin, que no admite presiones de nadie y ahí lo tenéis aun trabajando en su A Song of Ice and Fire.

Por otro, en ese último tercio final, el autor introduce una serie de líneas narrativas que bien podrían haber dado para unos cuantos volúmenes y que sin embargo, apenas son utilizados para introducir, matar o resucitar a personajes y llevarles a empujones a un final predecible desde bastantes capítulos antes del final. Que duda cabe, el lector se podría sentir maltratado, y reclamar con justicia un poco más de cariño.

Finalmente, otro aspecto que he encontrado destacable es lo poco que se ha explotado el aspecto fantástico de la obra, pasando muy por encima, a mi parecer, con los elementos fantásticos. Estos adecuadamente explotados podría haber dado mucho juego, ni que decir tiene, obras derivadas.

En cualquier caso, se trata de una obra ciertamente recomendable, entretenida y a recordar. Creo que puede servir sin duda para la iniciación de la muchachada o incluso para versiones cinematográficas o novela gráfica (por cierto, no he comprobado si existen).