Tenía mucho tiempo este libro en mi agenda, a raiz de que a su autora, Anne Applebaum, la entrevistarán en algún diario de tirada nacional. Tenerlo en formato digital y sufrir algunas noches de insomnio hicieron el resto.
Se trata de un libro un tanto decepcionante, que podría encuadrarse en los de periodistas metidos a escritores. Aunque lo cierto es que la autora, bastante prolífica, es una periodista escritora conocida por sus libros de denuncia de los crimenes que el el socialimo cometió en Polonia y en todo el bloque soviético.
En este libro intenta, bajo mi punto de vista de una manera bastante falta de rigor, analizar la proliferación de regímenes democráticos con importantes tintes autoritarios, donde las instituciones se ven degradadas por partidos corrompidos hasta el tuetano que sustentan primeros ministros populistas, cometiendo todo tipo de tropelias a la luz del día, ante un electorado dividido entre aquellos que les importa una higa y los que viven amamantados de odio.
Aunque la autora intenta un análisis sociológico de los temores que llevan a la ciudadania a respaldar tales individuos y regímenes a los que no le comparías un coche usado, los análisis son superficiales, practicamente relativos a experiencias personales de la autora y carente de toda referencia o estudio sociologico que pudiese respaldar sus opiniones.
El hecho de dar cobertura a los gobiernos recientes de Polonia, Hungría, el Reino Unido o USA, despierta el interés por su actualidad, pero lamentablemente, el desarrollo no alcanza las expectativas y por otra parte, uno no deja de preguntarse lo extremadamente cerca que la autora estuvo de todos y cada uno de esos gobiernos, antes de romper con ellos. Aunque pudiese sonar a chiste, uno llega a pensar que el próximo estará formado por sus actuales amigos.
La autora relaciona todos estos casos, incluyendo algunas de las corrientes presentes en partidos como Vox en España, con un hilo conductor de contactos, que en algunos casos parecen alienados y en otros movidos por extraños intereses que no llegan a aclararse, pero cuyo ideario el libro no llega a presentar de coherente.
Por otra parte, y a pesar del historial de la autora, creo que el texto no menciona en ningun momento, el papel de Rusia en el surgimiento de movimientos desatabilizadores de caracter nacionalista y de extrema izaquierda que han asolado Europa del sur, principalmente Italia, Grecia, España, y LATAM. Esa vertiente pasa diría yo que completamente inadvertida.
Por lo que concluiría diciendo que se trata de un libro interesantemente decepcionate e incompleto, que solo las largas esperas en el aeropuerto convierten en éxitos para regocijo de autores y editoriales.